Butacas especialmente diseñadas para uso en Salas de Actos y Conferencias
Concept Lagom
A lo largo de la historia el lenguaje ha servido para que las culturas puedan expresar conceptos que describieran situaciones, ideas o cosas. Unas emergen con fuerza y se mantienen a lo largo de muchos años y décadas, otras dejan de usarse en el día a día con el paso del tiempo.
Un ejemplo lo tenemos con el wifi, un término que se acuñó para la conectividad inalámbrica y que hoy día ya lo tenemos tan integrado que casi no lo mencionamos, lo vemos como algo natural y lo damos por hecho. Palabras como máquina de vapor o también el desaparecido telégrafo ya inexistentes, son otro ejemplo de términos que ya desaparecieron y que fueron un hecho transformador para su época.
A día de hoy y con un estilo de vida tan consumista por lo inmediato, perdemos perspectiva al adolecer de una impaciencia que se alimenta de un exceso en las intuiciones y no querer así hacer un recorrido por la narrativa explicativa de entender mejor lo que hacemos, pero también de lo que percibimos. Por ello, en una sociedad tan saturada hay quien busca un respiro, detenerse y mirar con otros ojos para encontrar un eje desde donde converjan mejor las ideas.
Buscamos entonces un equilibrio o un recurso que nos aporte la llave para comprender la definición conjunta de multitud de procesos complejos, poder definirlos y asimilarlos desde un área segura sin distracciones. Por ello nacen los conceptos, un resumen o de características y cualidades de una forma de pensar y actuar.
Un ejemplo de concepto lo tenemos en uno de nuestros artículos anteriores con el «easement» aplicado a las butacas de cines, teatros o salas de actos, donde la comodidad es el eje central para lograr un momento de relax frente a un día a día ajetreado y lleno de estrés.
En esta ocasión subimos un peldaño más para ofrecer una butaca que representa algo más que un momento de relax. Nos centramos más en la moderación y el equilibrio a cada momento del proceso, con un diseño más actual pero sin abandonar las referencias naturales de la madera.
Esto es lo que significa el concepto «Lagom», representados por las butacas Radom, Decor, Aire y Nugat. Lo justo y necesario en un diseño que une una parte de la naturaleza con la modernidad de la ciudad.
Estos diseños contribuyen en la medida de lo posible a un equilibrio y centralidad, ajustando en lo posible la simbiosis naturaleza-ciudad para que convivan en un mundo globalizado que todo lo mezcla e impregna, dejando a veces las ideas y cosas diluidas en una valoración trivial.
Es por ello que estas butacas están pensadas para que el usuario o público que las use, se sientan en equilibrio con su entorno, apreciándose el correcto balance de materiales con los que se fabrican cada una de estas butacas.
Desde su estructura, la madera o el tapizado, todo está pensado para hacer aflorar el mundo natural con su madera en colores claros y a la vez las exigencias de un ritmo de vida demasiado acelerado con sutiles líneas enérgicas.
Sus tapizados ayudan a tener una sedestación prolongada y cómoda en ambientes de aprendizaje, facilitando el fluir de las ideas. Se dice además que para contribuir a un buen aprendizaje es necesario un entorno adecuado y para ello tanto la voz como el tono empleado son básicos como forma del contenido a transmitir. Pero no nos olvidemos del entorno físico, como es el interiorismo, siendo esta gama de butacas muy adaptable a diferentes estilos de decoración.
En este artículo hemos desarrollado las razones por las cuales existe cada vez más la necesidad de buscar medios, recursos y anclajes seguros que faciliten un cambio en el ritmo de vida de las personas. Pero además, hacemos énfasis en la mentalidad de utilizar la información de manera moderada y pausada. De ahí que pensáramos en el diseño de una serie de butacas para cines, teatros y salas de actos que favorecieran un entorno donde desarrollar las ideas, aportando equilibrio y moderación en el interiorismo del lugar donde van a ser usadas.