Sí !!, lo hemos dicho bien !!, trascenio !!. Aunque otra forma más popular y anglosajona es la de backstage, está situada en la parte posterior al escenario de un teatro y donde actores, maquilladores, regidores y directores de escenas ponen la última puesta a punto.
Entre bambalinas se comenta muchas veces y no se ve porque hay una gran tela negra o telón de fondo que lo separa del escenario.
En esta zona del teatro el trepidante ritmo, los nervios y los brevísimos ensayos pueden generar ruidos entre escenas, así como el movimiento de decorados que se solapan a diferentes distancias, alternándose unos u otros.
Un ejemplo de esclusa lo tenemos en el teatro Juan Bravo de Segovia, donde en su parte trasera y laterales de su escenario se puede observar un pasillo que aislado por cortinas acústicas impide la transmisión de ruidos hacia el escenario.
Para evitar que los ruidos se transmitan al interior del teatro o patio de butacas, muchos teatros instalan cortinas acústicas profesionales formando así una pantalla o esclusa que aísla una zona de otra.
Técnicamente una esclusa acústica es un vestíbulo que separa la sala del vestíbulo principal y las zonas de circulación, para aislar la sala de ruidos y luz del exterior; también se usa para separar al escenario de las áreas al fondo del teatro.
Para crear una esclusa acústica en la parte trasera de un escenario de teatro, se emplean cortinas acústicas correderas, confeccionadas con tejidos ignífugos M1 y con varias capas.
Otro tipo de esclusa son los pasillos aledaños que dan acceso a las diferentes puertas de entrada al patio de butacas de un teatro. Entre el foyer y los pasillos hay un espacio que se protege con cortinas especiales para aislar el ruido y su efecto es el de que no transmita ruido hacia el interior del teatro.
Un sistema de acústica variable compuesto de telones profesionales permiten modificar la acústica interior del recinto, en ocasiones habilitados en una posición en ángulo regulable para redirigir el sonido y hacer que tenga más o menos recorrido.
Este tipo de telones profesionales están concebidos en forma de velas o paneles rígidos y son accionados para variar su ángulo redirigiendo el sonido a conveniencia.
No solo los telones profesionales para teatros tienen una función decorativa y protocolaria de apertura y cierre.
En muchos teatros hay telones técnicos que instalados estratégicamente además de dar una imagen técnica y a la vez decorativa, aportan un plus en la homogeneización del sonido, creando un ambiente de cámara reverberante adaptable según las necesidades.
Incluso las propias cortinas de acceso a los distintos palcos de un teatro también cumplen una función acústica de aislamiento, porque los pasillos de acceso al patio de butaca han de hacer igualmente de esclusa acústica.
Los profesionales que trabajan en el trascenio cumplen una función, la de controlar los distintos decorados, iluminación, movimiento de telones y sonido, dando apoyo a la mesa principal de control que desde un lugar estratégico, normalmente en las últimas butacas, por medio de consolas digitales y por un director técnico que lo coordina todo y son los que abren y cierran los telones del teatro.