Muchos han pasado ya por las butacas del Teatro Lope de Vega de Madrid para asistir a la recreación más mística y representativa de la sabana africana. Nos referimos al musical del Rey León, con una puesta en escena cada vez más elaborada, el público que acude a ver este espectacular musical llega a experimentar el misticismo y lo más profundo de esta región tan salvaje.
Lo primero que nos llama la atención al ver la actuación sobre el escenario es la danza contoneante que mece armoniosamente cada personaje, entrelazándose imaginariamente con la fina hierba seca pareciéndose a una suave melodía soplada por el viento y que guarda los desvelos de los más débiles ante los grandes depredadores.
El ciclo vital de la sabana africana sigue vigente aunque en una representación teatral como esta, los más pequeños de la casa podrán adentrarse con sus padres y madres de manera inocente en una fábula muy bien elaborada que maneja con sutileza y cuidado aspectos que en nuestra vida real pueden crear controversia, como es el hecho de la necesidad o no de comer carne, o la jerarquía de la sociedad representada por un monarca.
Pero lo que realmente tiene más visibilidad y trascendencia en una obra de estas características es que tras su estreno allá por el año 2011, es el concepto de honor y lealtad hacia un orden social justo donde impere la cordura y el sentido común, necesitando para ello un árbitro, en este caso Simba. Una quimera para los tiempos que corren hoy día si lo queremos trasladar a la sociedad humana, aunque siempre habrá un Simba que reaccione y se comprometa con los valores fundamentales que gobiernan toda sociedad.
Simba ante la muerte de su padre Mufasa ve como tiene que huir en un largo destierro para aprender el valor de afrontar su propio destino, la de heredar el reinado que dejó su padre. En su travesía se encuentra con sus peores temores pero también con algunos personajes que le enseñan a confiar en él mismo, como el jabalí Pumba y el suricato Timón para volver a su hogar y a reclamar el trono que le pertenece una vez ya siendo adulto. El Rey León” es un espectáculo recomendadísimo para todos aquellos que quieran reír, llorar, deleitarse visualmente y vivir un sinfín de experiencias sentados en las butacas del teatro Lope de Vega.