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Los alzadores infantiles para butacas de cines que solemos ver en sus entradas están diseñados para un determinado público de corta edad, peso y estatura. Dependiendo del tipo de butaca y su disposición geométrica en la sala se tendrá una mejor visibilidad para todos los públicos. Normalmente la línea visual de una persona adulta desde su butaca con respecto al centro de la pantalla está en torno a los 100 cms tomados desde la base del asiento. Con los niños y niñas entre los 2 y 6 años de edad las alturas medias según la OMS oscilan entre los 88cms y los 101cms. Por otra parte si tomamos una butaca estandarizada como la Celend cuyas medidas desde la base de su asiento hasta la horizontal del respaldo son de 52cms, aún tenemos margen si colocamos un alzador infantil ganando 15 cms en altura para que los niños y niñas sitúen su visual aproximadamente a la altura deseada.

En el estudio y diseño de una sala de cine se tienen en cuenta la inclinación de sus butacas, siendo necesario adoptar también medidas correctoras para facilitar una línea visual escalonada y a veces incluso en zig-zag. Pero al mismo tiempo se tienen en cuenta las medidas antropométricas de las personas para conseguir unos asientos lo más ergonómicos posibles, atendiendo a unos datos medios de la población.

Pero si echamos la vista atrás, las antiguas salas de cines aún teniendo una gran capacidad para su público, no estaban diseñadas lo que se dice correctamente, ni en medidas de seguridad ni tampoco en cuanto a la calidad de visión, pues a veces era típico encontrarse delante a una persona muy alta que nos tapaba parte de la pantalla y eso era un fastidio. Con el paso del tiempo de aquellas viejas butacas de madera, se pasaron a las cómodas butacas ecológicas como la Celend, incluyendo para ello métodos de instalación en zig-zag y con unos grados de inclinación suficientes para facilitar sin problemas la visión de todos los asistentes a una película. Al mismo tiempo con la aparición de los alzadores infantiles Korflip los niños y niñas pudieron disfrutar de cualquier película sin los problemas que antes tenían por su altura.

La aplicación de criterios antropométricos en el diseño de butacas y alzadores infantiles para cines se basa en el establecimiento de determinadas relaciones entre las dimensiones de este tipo de asientos y las medidas relacionadas con el cuerpo humano. Hay que tener en cuenta que a estos criterios hay que sumarle las distancias que hay entre la pantalla de cine y el último público.  Por lo tanto la posición de los espectadores dentro de una sala cinematográfica será aquella que permita la correcta visión de la imagen en la pantalla a todos los espectadores del cine. Para ello los ángulos de visión tanto horizontal como vertical tendrán que estar dentro de los límites marcados por la norma EG-18. Se recomienda siempre que el ángulo de visión horizontal no sobrepase nunca los 45º para evitar así el efecto distorsión.