Son muchos los servicios que nos brindan cada vez más los cines en España, como los Renoir, que cuentan con más de 20 años de experiencia ofreciendo sus locales y salas para variados eventos, se pueden hacer sesiones especiales para:
Proyecciones para colegios.
Preestrenos.
Ruedas de prensa.
Festivales de Cine.
Localizaciones para rodajes.
Entregas de premios.
Presentaciones corporativas.
Seminarios
Pero hay un antes y un después en lo que se refiere a la restauración, porque todos sabemos que no pueden faltar las palomitas y la cocacola en un cine, pues bien, ahora Yelmo Cines incorpora butacas reclinables y que cuenta con cuatro salas, tres con capacidad para 39 personas y una más grande en la que hay espacio para 108 espectadores.
Entre las novedades que incorpora está su servicio de restaurante, elaborado por una cocina profesional, que un equipo de 20 camareros sirve directamente en la butaca del cliente. Eso sí, se recomienda llegar entre 15 y 20 minutos antes a la sala para encargar la comida, bien en la propia butaca o en la barra.
Lógicamente no todos las mejoras en servicios iban a ser tan tangibles, pues la seguridad también forma parte de los avances que van incorporando cualquier cine. En este campo, los cines de España aprueban con un notable alto, pues las exigencias en cuanto a prevención de incendios e instalación de materiales es muy específica y clara. En este campo los fabricantes se han puesto las pilas y diseñan butacas para cines muy confortables y seguras, incorporando tapicerías y otros componentes a prueba de fuego.
En cuanto a las butacas destinadas a niños y niñas, aún no se pueden adaptar el tamaño, pues todas han de ser iguales, pero sí se pueden solucionar para los más pequeños con un producto novedoso, como son los alzadores infantiles. Es un elevador de pvc ignífugo que levanta unos 25 a 30 centímetros del asiento a los más pequeños, haciendo que puedan ver perfectamente la película.
Otro aspecto de la seguridad que han mejorado mucho los cines en España, es la seguridad pública, entendiendo por ello el salvaguardar los bienes privados de las personas, siendo este apartado uno de los elementos primordiales por tratarse de establecimientos públicos en los que continuamente hay mucha aglomeración de gente y se manejan altas cantidades de dinero. La susceptibilidad ante robos se incrementa durante las navidades, ya que los ladrones saben la actividad y afluencia de estos lugares en fechas clave y se convierten en un blanco perfecto.